Un futuro muy cercano en el que la presidenta de un emporio de moda es también la ‘directora’ de California (no gobernadora, nótese el matiz empresarial) en el que las IAs, en plural, ya gobiernan el mundo, en el que Coca Cola fabrica gotas naturales adaptógenas que interactúan mal con el alcohol y en el que importa más perfeccionar la última colección de la marca que el desplome de una ciudad. Así ha sido el no debut de Demna en Gucci. No debut, porque presentó el lunes a través de fotos una colección basada en clichés, y ha dejado a Spike Jonze y a Halina Reijn que, con esa misma colección y un casting de lujo, crearán en una película su propia visión de Gucci, también llena de clichés: la heredera perfeccionista y neurótica (Demi Moore) con nepobabies conspiranoicos y alejados de la realidad (Edward Norton y Elliot Page) que tiene que fingir ante un periodista de Vanity Fair (Ed Harris) que su vida es perfecta. Hasta que los adaptógenos y el champán se le van de las manos. De esta forma, con el estreno de la cinta The Tiger, una especie de Succession psicodélico, Demna ha hecho su puesta de largo en Gucci. Tiene más sentido de lo que parece. Vayamos por partes.
Fuente: elpais.com