Kelley Mack, que interpretó a una de las supervivientes del refugio de Hilltop en la serie de zombis The Walking Dead, murió el pasado sábado en su Cincinnati natal a los 33 años a causa del tumor cerebral que sufría desde años, como anunció su familia a través de su cuenta de Instagram este martes. La actriz, conocida por dar vida al personaje de Addy en cinco episodios entre 2018 y 2019, hizo numerosos anuncios desde niña y apareció en capítulos de series como 9-1-1 o Chicago Med.
Fuente: elpais.com